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Voluntades anticipadas: Cómo hablarlo y por qué es importante

Hablar sobre el final de la vida nunca es fácil, sobre todo si el tiempo que queda para la llegada es muy limitado. Muchas familias evitan el tema por miedo, tristeza o simplemente porque no saben cómo abordarlo. Sin embargo, hablar sobre las voluntades anticipadas es, en realidad, un acto de cuidado, amor y respeto hacia la persona mayor


Hoy vamos a entender qué son, cómo tratar el tema con la máxima delicadeza y qué aspectos legales y emocionales debemos tener en cuenta


¿Qué son las voluntades anticipadas? 

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Las voluntades anticipadas, también llamadas testamento, son un documento legal en el que la persona expresa cómo quiere ser atendida médicamente si en el futuro no puede decidir por sí misma

Vamos a poner un ejemplo; puede dejar por escrito si desea o no recibir ciertos tratamientos, si quiere donar órganos, o qué persona debe tomar decisiones en su nombre


Debemos dejar claro que cada comunidad autónoma tiene su propio registro oficial, donde el documento queda archivado y es accesible para los profesionales sanitarios en el caso necesario. Si quieres dejar escritas las voluntades anticipadas, debes informarte en tu centro de salud o en el hospital de referencia del lugar donde vives


¿Por qué es tan importante hablar de este tema? 

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Tomar esta decisión antes de que llegue una situación crítica evita conflictos familiares y reduce la carga emocional de los cuidadores


La mayoría de las personas no deja por escrito sus deseos sobre la atención médica, y cuando ocurre una situación inesperada, sus familias se enfrentan a decisiones difíciles, acompañadas de angustia, duda o culpa por no saber qué habría querido su ser querido

Además, la existencia de estas voluntades, garantiza que la atención médica sea coherente con los valores y deseos de la persona


En otras palabras, es una forma de mantener su autonomía incluso cuando ya no puede expresarla


¿Cómo iniciamos esta conversación sin miedo? 

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Hablar del final de la vida no significa rendirse, significa prepararse con serenidad y responsabilidad. Incluso nosotros los cuidadores, debemos hacernos preguntas relacionadas con este tema, puede que te sorprenda las conclusiones a las que puedes llegar


Vamos a explicar algunas estrategias para poder comenzar una conversación de este tipo:


  1. Elige un buen momento. Evita hacerlo en medio de una crisis o enfermedad aguda. Busca un momento tranquilo y sin interrupciones

  2. Usa un tono empático. Puedes empezar con frases como: “He estado pensando en cómo podríamos respetar tus decisiones médicas si algún día no pudieras expresarlas”

  3. Escucha sin juzgar. Tal vez tenga miedo o no quiera hablar del tema al principio. No fuerces la situación, respeta su ritmo

  4. Involucra al resto de la familia. Es importante que todos estéis informados para evitar malentendidos y conflictos. Debemos apoyar y no confrontar a nuestro familiar

  5. Apóyate en un profesional. Médicos, enfermeros o trabajadores sociales pueden ayudarte a explicar las opciones disponibles en caso de que su enfermedad evolucione


Aspectos legales que debemos conocer sobre este documento

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  • En España, las voluntades anticipadas están reguladas por ley en todas las comunidades autónomas. Infórmate como se regula en la tuya

  • Deben redactarse por escrito y firmarse ante notario, funcionario del registro sanitario o tres testigos, según marque la comunidad en la que viváis

  • Se pueden modificar o anular en cualquier momento. En el caso de que cambie la situación o su opinión, se puede modificar perfectamente

  • Es “recomendable” designar un representante o persona de confianza que defienda los deseos del paciente ante el equipo médico, si esto no genera un conflicto familiar de cualquier tipo


Consulta el proceso exacto de tu comunidad autónoma en internet, tu centro de salud o hospital de referencia. Te darás cuenta que los trabajadores de estas unidades son personas con muchísima empatía y profesionalidad


¿Qué impacto emocional puede provocar en la familia? 

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Para muchos cuidadores, hablar de esto puede generar angustia o culpa

Sin embargo, cuando se aborda desde el amor y el respeto, se convierte en una oportunidad para reforzar el vínculo familiar

 Saber que se están cumpliendo los deseos de tu ser querido, esto alivia la carga emocional y reduce la incertidumbre en los momentos difíciles. El rol del cuidador conlleva una gran responsabilidad y, con frecuencia, no recibe el reconocimiento que merece. Por eso, anticiparse y evitar decisiones que puedan generar culpa o incertidumbre es una forma de proteger tanto al familiar como a uno mismo


Para finalizar y ayudarnos a reforzar este tema


Hablar de las voluntades anticipadas no es un acto de tristeza, sino de amor consciente

Es cuidar con responsabilidad, anticiparse al sufrimiento innecesario y garantizar que la persona mayor sea escuchada hasta el final

En Cuidado Íntegro creemos que cuidar también es respetar las decisiones del otro

Por eso, te animamos a informarte, hablarlo con calma y dar ese paso que puede marcar la diferencia en el futuro

 
 
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