Osteoporosis: Una Enfermedad Silenciosa ☠️
- Mario Fernández
- 12 may
- 6 Min. de lectura
La osteoporosis es una enfermedad ósea que se caracteriza por la disminución de la densidad y calidad de los huesos, lo que los hace más frágiles y propensos a fracturas. Afecta principalmente a adultos mayores, especialmente a mujeres posmenopáusicas, aunque también puede presentarse en hombres y personas más jóvenes con ciertos factores de riesgo. Continúa con nosotros hasta el final del artículo, exploraremos qué es la osteoporosis, sus complicaciones, los riesgos de fracturas, cómo prevenirla, los alimentos ricos en calcio y la importancia de la vitamina D para la salud de tus huesos.
¿Conoces la osteoporosis? ¡Te lo contamos!
La osteoporosis es conocida como una de las "enfermedades silenciosas". Esta enfermedad debilita tus huesos poco a poco sin síntomas evidentes hasta que ocurre una fractura. De ahí que esté incluida en una de las enfermedades silenciosas.
Nuestros huesos son tejidos vivos que se renuevan constantemente, para que nos entiendas, debe haber un equilibrio entre la formación de hueso nuevo y la reabsorción del hueso viejo. En la osteoporosis, este equilibrio está alterado, resultando en una pérdida de la masa ósea, es decir, de hueso.
Existen factores de riesgo y te los numeramos a continuación :
Edad avanzada (Existe mayor riesgo después de los 50 años).
Menopausia, debido a la disminución de estrógenos. ¡Cuidado con este factor de riesgo!. Si eres mujer, debes tener este punto muy en cuenta, porque en esta etapa de tu vida debes ingerir alta cantidad de calcio
¿Antecedentes familiares de osteoporosis?. Debes tenerlo en cuenta
Bajo peso corporal o estructura ósea pequeña.
Consumo excesivo de alcohol, tabaquismo o vida sedentaria. ¡Mantén una vida sana!
Deficiencias de calcio y vitamina D. Es interesante realizarse analíticas de sangre de manera anual para controlar estos dos elementos, el médico o enfermero lo sabe, no está de más recordárselo cuando vaya a la revisión.
Ciertas enfermedades (como artritis reumatoide) o medicamentos (como corticosteroides).
Complicaciones de la osteoporosis
La principal complicación de la osteoporosis es el aumento del riesgo de fracturas óseas, que pueden tener consecuencias graves, especialmente en personas mayores.
Las fracturas más comunes ocurren en:
Cadera: Pueden requerir cirugía y causar pérdida de movilidad o independencia. En muchas fracturas de cadera pensamos que son producidas por la caída de la persona pero en muchas de las ocasiones es ¡al revés!, debido a la osteoporosis se ha producido una fractura de cadera que provoca la caída de la persona.
Columna vertebral: Las fracturas vertebrales pueden provocar dolor crónico, deformidades como la joroba (cifosis) y reducción de la estatura.
Muñeca: Frecuentes en caídas, la recuperación es lenta y complicada por lo que normalmente queda afectada la funcionalidad de la mano.
Estas fracturas generan dolor y discapacidad, pero también pueden aumentar el ¡riesgo de mortalidad!, especialmente en el caso de fracturas de cadera. Además, la osteoporosis puede afectar la calidad de vida no solo de la persona sino de los cuidadores y familiares, ya que limitan la capacidad del afectado para realizar actividades diarias y aumenta la carga de trabajo de las personas que están a su alrededor, afectando al bienestar emocional. ¡Cuidadores y familiares! Es importante comprender este artículo para prevenir accidentes y cuidarnos a nosotros mismos para que, en el futuro controlemos esta enfermedad y no nos afecte.
Riesgos de fracturas
El riesgo de fracturas en personas con osteoporosis aumenta debido a que nuestros huesos son más frágiles. Una simple caída, un tropiezo o incluso un movimiento brusco pueden provocar una fractura.
Las mujeres posmenopáusicas ¡tienen un riesgo más alto!: se estima que 1 de cada 2 mujeres mayores de 50 años sufrirá una fractura relacionada con la osteoporosis en su vida. ¿Increíble verdad?
Los hombres NO están exentos, aunque su riesgo es menor.
Para disminuir el riesgo de fracturas debemos tener control sobre el ambiente donde convivimos para evitar estas caídas, tropiezos o movimientos bruscos. Algunos de los factores que incrementan el riesgo de caídas incluyen:
Falta de ejercicio, que debilita los músculos y reduce el equilibrio.
Malas condiciones de seguridad en el hogar, como alfombras sueltas, escalones, suelos resbaladizos, falta de pasamanos en escaleras o baño...
Problemas de visión o equilibrio, ¿Quién no tiene problemas de visión y equilibrio a una edad avanzada? Debemos ponernos en el lugar de nuestro familiar o paciente para valorar los riesgos existentes y eliminarlos en el caso que se pueda.
Cómo prevenir esta enfermedad
"Es mejor prevenir que curar". Este dicho se cumple a la perfección en este caso.
La prevención se debe comenzar desde la infancia, ya que los huesos alcanzan su máxima densidad en la juventud (alrededor de los 20-30 años). Sin embargo, en cualquier etapa de la vida podemos comenzar a proteger la salud de nuestros huesos:
Ejercicio regular: Podemos realizar actividades que impliquen cargas de peso, como caminar, carrera, bicicleta, levantamiento de pesas o material improvisado en casa. Estos ejercicios fortalecen los huesos y mejoran el equilibrio. Además, podemos realizar otras actividades como pilates o actividades dirigidas adaptadas a nuestras capacidades.
Dieta rica en calcio y vitamina D: Consumir alimentos que promuevan la salud ósea es clave (detallaremos esto más adelante).
Evitar hábitos perjudiciales: Reducir el consumo de alcohol, dejar de fumar y limitar la cafeína, ya que disminuyen la absorción y fijación de calcio.
Revisiones por tu médico o enfermero: A partir de los 50 años, especialmente en mujeres posmenopáusicas, es recomendable realizar densitometrías óseas para evaluar la densidad ósea. Esta prueba puede ser difícil acceder a ella a través de la Seguridad Social, podemos buscar otras alternativas como análisis de sangre controlando los valores de calcio, hierro, vitamina D y otros datos disponibles en un análisis rutinario de sangre.
Suplementos si es necesario: En caso de deficiencias, se puede recomendar suplementos de calcio o vitamina D.
Prevención de caídas: Control ambiental como mejorar la seguridad en el hogar o en las zonas comunes donde frecuenta nuestro familiar o paciente, usar un calzado adecuado es muy importante para prevenir las caídas. Con estas medidas reducimos el riesgo de fracturas relacionadas con las caídas.
Alimentación rica en calcio
El calcio es un mineral esencial para la formación y mantenimiento de nuestros huesos. La ingesta diaria recomendada varía según la edad, pero los adultos generalmente necesitamos entre 1,000 y 1,200 mg al día.
¿Cómo calculamos la cantidad que necesitamos y de donde la conseguimos? Tranquilidad, vamos a ver a continuación algunos alimentos ricos en calcio:
Lácteos: Leche, yogur natural y queso (preferiblemente bajos en grasa). Ejemplo: un vaso de leche (240 ml) aporta unos 300 mg de calcio.
Pescados con espinas comestibles: Sardinas y salmón enlatado. Una porción de sardinas (100 g) puede aportar hasta 400 mg de calcio.
Verduras de hoja verde: Brócoli, col rizada, espinacas (Cuidado con las espinacas, tienen una sustancia llamada oxalato que pueden reducir la absorción de calcio). Una taza de brócoli cocido aporta unos 60 mg.
Frutos secos y semillas: Almendras, semillas de chía y sésamo. Un puñado de almendras (30 g) aporta aproximadamente 75 mg.
Legumbres: Alubias blancas y garbanzos. Una taza de alubias cocidas puede ofrecer hasta 150 mg.
Alimentos fortificados: Algunos cereales, jugos de fruta natural y bebidas vegetales (como la de almendra o soja) están enriquecidos con calcio.
Es importante combinar estos alimentos con una dieta equilibrada y evitar el exceso de sal, ya que puede aumentar la pérdida de calcio a través de la orina.
La importancia de la vitamina D para la fijación ósea
La vitamina D es crucial para la absorción de calcio en los intestinos y su incorporación en los huesos. Si no tenemos suficiente vitamina D, aunque tengamos una dieta rica en calcio no será efectiva.
Vamos a explorar de dónde podemos obtener la vitamina D:
Exposición al sol: La única vitamina que puede generar nuestro cuerpo, es la vitamina D. La piel produce vitamina D al exponerse a la luz solar. Bastan 10-30 minutos de exposición diaria en brazos, piernas o rostro para producir suficiente vitamina D. Así que, si tenemos la vitamina D baja, ¡¡Necesitamos unas vacaciones en la playa de Alicante por prescripción médica!!
Alimentos: Pescados grasos (salmón, atún, caballa), yema de huevo, hígado o alimentos como leche o cereales.
Suplementos: Si vivimos en una zona con poca luz solar, tenemos dos opciones: Comprarnos un apartamento en la playa y mudarnos o tomar suplementos de vitamina D (generalmente 800-2,000 UI diarias), siempre bajo prescripción médica.
La deficiencia de vitamina D es más común de lo que pensamos, especialmente en adultos mayores, personas con piel oscura o aquellos que pasan poco tiempo al aire libre. Como hemos dicho antes, un análisis de sangre nos permite valorar los niveles de vitamina D y si se requiere suplementación.
A tener en cuenta: Parte del metabolismo de la vitamina D se realiza en el riñón, por lo que si nuestro familiar o paciente tiene daño renal, tenemos que tenerlo en cuenta por si es necesario la administración de vitamina D de manera diferente.
La osteoporosis es una enfermedad prevenible y manejable con las estrategias adecuadas. Adoptar un estilo de vida saludable que incluya ejercicio, una dieta rica en calcio y vitamina D, y revisiones con tu médico o enfermero/a de manera regular.
¡Cuida tus huesos hoy para disfrutar de un mañana más fuerte!
